Tipos de preguntas que utilizamos los coaches

Explorar los diferentes tipos de preguntas es fundamental para entender cómo utilizarlas de manera efectiva en el proceso de coaching. Aquí hay un compendio de algunos tipos de preguntas comunes, junto con su descripción y cuándo pueden ser útiles:

Preguntas Abiertas:

Descripción: Son preguntas que invitan a respuestas detalladas y reflexivas, ya que no pueden ser respondidas con un simple "sí" o "no". Estas preguntas fomentan la exploración y el diálogo abierto, permitiendo al coachee expresar sus pensamientos, sentimientos y experiencias en profundidad.

Cuándo usarlas: Las preguntas abiertas son útiles para promover la reflexión, estimular la creatividad, explorar diferentes perspectivas y profundizar en la comprensión de un tema. Son especialmente eficaces para abrir el diálogo, generar ideas y facilitar el autoconocimiento y el descubrimiento personal.

Preguntas Cerradas:

Descripción: Son preguntas que pueden ser respondidas con un "sí" o "no" o con información breve y directa. Suelen comenzar con palabras como "¿Es?", "¿Está?" o "¿Tiene?".

Cuándo usarlas: Las preguntas cerradas son útiles para obtener información específica, confirmar hechos o llegar a una conclusión rápida sobre un tema.

Preguntas de Clarificación:

Descripción: Son preguntas diseñadas para obtener más detalles o aclarar la información proporcionada por el coachee. Ayudan a garantizar que el coach comprenda completamente lo que se está discutiendo.

Cuándo usarlas: Son útiles cuando la información proporcionada no es clara o necesita ser explicada con más detalle para comprender completamente la situación.

Preguntas de Reflexión:

Descripción: Son preguntas que invitan al coachee a reflexionar sobre sus pensamientos, sentimientos y experiencias. Buscan profundizar en la comprensión y generar nuevas perspectivas.

Cuándo usarlas: Las preguntas de reflexión son útiles cuando se busca promover el autoconocimiento, la autorreflexión y el crecimiento personal del coachee.

Preguntas de Acción:

Descripción: Son preguntas orientadas hacia el futuro que ayudan al coachee a identificar acciones concretas que puede tomar para lograr sus objetivos. Buscan generar compromiso y motivación para el cambio.

Cuándo usarlas: Las preguntas de acción son útiles al final de una sesión de coaching para ayudar al coachee a planificar y comprometerse con pasos específicos hacia el cambio y el progreso.


Descubre por qué los coaches necesitamos hacer preguntas reflexivas


¿Las preguntas abiertas son las mismas preguntas reflexivas?


Si bien las preguntas abiertas y las preguntas reflexivas comparten algunas características similares, no son exactamente lo mismo. Las preguntas abiertas se refieren al tipo de pregunta que invita a respuestas detalladas y expansivas, mientras que las preguntas reflexivas se centran específicamente en fomentar la reflexión y el autoanálisis.

Las preguntas reflexivas pueden ser tanto abiertas como cerradas en su formulación, pero su propósito principal es llevar al coachee a pensar más profundamente sobre un tema, explorar sus pensamientos y emociones, y llegar a nuevas perspectivas o soluciones.

Ten en cuenta lo siguiente: todas las preguntas reflexivas son abiertas en el sentido de que no se pueden responder con un simple "sí" o "no", pero no todas las preguntas abiertas son necesariamente reflexivas, ya que algunas pueden centrarse únicamente en obtener información o iniciar una conversación sin profundidad de reflexión.

Cuadro comparativo con preguntas abiertas versus reflexivas

Aspecto

Preguntas Abiertas

Preguntas Reflexivas

Definición

Invitan a respuestas detalladas y expansivas.

Fomentan la reflexión profunda y el autoanálisis.

Propósito

Explorar temas en profundidad y obtener información.

Estimular el pensamiento crítico y la introspección.

Respuestas

No se pueden responder con un simple "sí" o "no".

Fomentan respuestas que implican reflexión y análisis.

Ejemplo

"¿Cómo te sentiste cuando ocurrió eso?"

"¿Qué significado tiene esto para ti?"

Enfoque

Centradas en obtener información y ampliar la conversación.

Orientadas a provocar un cambio en la perspectiva o pensamiento del coachee.

Profundidad

No necesariamente profundas; pueden ser superficiales o exploratorias.

Se centran en explorar emociones, valores y creencias subyacentes.

Impacto

Pueden iniciar una conversación, pero no siempre llevan a una reflexión profunda.

Fomentan la autoconciencia y el crecimiento personal.

Este cuadro comparativo destaca las diferencias clave entre las preguntas abiertas y reflexivas en términos de definición, propósito, respuestas esperadas, enfoque, profundidad y impacto en el proceso de coaching.

Ejemplos:

Preguntas Abiertas

Preguntas Reflexivas

"¿Cómo te sientes respecto a esta situación?"

"¿Qué significado tiene esto para ti?"

"¿Qué te gustaría lograr en esta sesión?"

"¿Cómo crees que tus acciones afectan a otros?"

"¿Qué opciones has considerado hasta ahora?"

"¿Cómo se alinea esto con tus valores?"

"¿Qué aspectos de este problema te preocupan más?"

"¿Qué te impide avanzar hacia tus metas?"

"¿Cuál es tu perspectiva sobre este tema?"

"¿Cómo te afectan tus pensamientos actuales?"

Conclusión

explorar los diferentes tipos de preguntas que utilizamos los coaches nos ha brindado una comprensión más profunda de cómo estas herramientas pueden impactar en el proceso de coaching. Desde preguntas abiertas que fomentan la reflexión hasta preguntas de acción que generan compromiso y motivación, cada tipo de pregunta tiene su propio propósito y aplicación en el contexto del coaching.

Es fundamental reconocer que la habilidad para realizar preguntas poderosas no es algo innato, sino que requiere práctica y entrenamiento constante. Al comprometernos con nuestro desarrollo profesional y personal, podemos mejorar nuestras habilidades para formular preguntas que desafíen, inspiren y guíen a nuestros coachees hacia el cambio y el crecimiento.

Por lo tanto, invito a cada coach a dedicar tiempo y esfuerzo a perfeccionar su capacidad para realizar preguntas efectivas. Participar en programas de formación, practicar con colegas y buscar retroalimentación son formas valiosas de mejorar nuestras habilidades en esta área crucial del coaching.

Al invertir en nuestro propio crecimiento como coaches, podemos alcanzar la maestría en la realización de preguntas poderosas y, en última instancia, brindar un apoyo más efectivo y significativo a nuestros coachees en su viaje hacia el éxito y el bienestar.